¿Como seguir?

Dejé a Alexia en el cochecito, subí las escaleras y cogí las maletas. Recogí toda la ropa que pude de la niña, y volví a bajar. Puse toda la ropa de Alexia en la lavadora, cuando le di al botón del encendido, escuché unos aullidos que venían de fuera, fui corriendo hasta la puerta, la abrí y allí estaba un lobo de pelaje rojizo.
-Jacob.- dije mientras miraba entre los árboles más cercanos a un lobo aullandole a otros dos lobos que lo seguían. No se si me habría escuchado, me encantaría correr y gritarle que le amaba, pero eso ya no le importaba.
Salí fuera de la casa, hasta el principio de los dos escalones del porche.
-¿Ya se fue?- dijo mientras se acercaba con paso lento. - i ya se fue, puedes estar tranquilo, creo que hoy no intentará matar a Alexia.- dije mientras desviaba la mirada hacia el suelo.-¿Ahora tienes vergüenza de mirame a la cara?
-Yo, yo no tengo nada de que avergonzarme Jacob, eres tú el que abandonó a tu familia.- dije mientras lo miraba a los ojos. -Dudo que tu querrías ver como me matan y matan a nuestra hija, si crees que los vampiros son seguros, es tu problema... de verdad me duele, pero no voy a correr riesgos...
-Hemos hablado de eso mil veces pero te cuesta que pudiera poner en peligro la vida de lo más importante que tengo... veo que eso es demasiado sentimiento para ti.
-Me voy, adios Bella.-dijo dando media vuelta.
-Alexia está bien, por cierto.- dije mientras señalaba hacia la casa.
-Ya lo dijiste, no voy a entrar... es tu casa, voy a ensuciarla.-dijo mientras daba dos pasos cortos hacia el bosque y se detenia para decirmelo.
-Puedes venir siempre que quieras es tu hija, yo no soy quién para impedirte que la veas...- dije mirandolo alejarse.
-Está bien.-dijo gritando.
Vi como Jake se adentraba en el bosque, y no tardé en escuchar el aullido de varios lobos, entré en casa, Alexia estaba en el cochecito con los ojos abiertos.-Hola cielo.- dije mientras acarciaba su mejilla. Tomé a la niña en brazos, y subí las escalareas, encendí la luz de su habitacion, la dejé en la cuna y entré en el cuarto de baño con la bañera pequeña para llenarla.
Volví a la habitación, puse la bañera en su lugar, desvestí a la niña y la metí en la bañera, me daba un poco de cosa, tan pequeña podria resbalarse con el agua, la agarre fuerte, y la mojé poco a poco, ella se quejaba, no le gustaria seguramente el frio y el agua. No estaba para nada a gusto sola, me hubiese gustado que mi madre estuviera aqui, pero no era capaz de decirle que habia discutido con Jacob, eran mis problemas, nuestros problemas y deberiamos solucionarnos nosotros.
Entonces cuando estaba sacando a la niña de la bañera sonó el telefono.- ¿Si?- dije mientras lo descolgaba. -¡Bella!-dijo mi madre contenta. - Hola mamá, ¿Qué tal?
-Todo bien y ¿tu?
-Bien, acabo de bañar a Alexia.- dije mientras la tapaba con una toalla seca.
-Mmm... Bella, que mal mientes.-dijo mi madre mientras hacia una risita nerviosa.
-¿Qué?- dije intentando parecer sorprendida.
-Bella, lo de Alexia te lo creo... pero lo de bien no.-dijo mi mamá explicandose.
-¿Por que? Estoy bien mamá.- dije convencida, o mas bien auto convenciéndome.
-Bella, soy tu madre, te conozco de toda la vida... a mi no me puedes engañar.
-No es nada mamá , solo es que estoy cansada, nada más.
-Bella... sino quieres contarlo esta bien... pero no mientas.
-No nada mamá, es una tonteria de Jacob y mía, no nos ponemos de acuerdo quienes seran los padrinos.- dije riendo amargamente.
-Esta bien.-dijo riendose.
-Mañana por la mañana, ire a poner en orden todos los papeles, y despues me pasaré por casa, ¿Estarás, no?